Un domingo o un día cualquiera, sales a pasear y te encuentras personajes pintorescos que se ganan la vida entreteniendo la de los demás.
Hace unos domingos me resultó curiosa la forma de ganarse la vida de este personaje.
Quizá debí fotografiar todo el proceso, pero cuando quise darme cuenta, ya era tarde.
Las piernas del bailarín son las piernas del "actor", y las de la bailarina son sus brazos. Una vez estuvo caracterizado, conectó la música e inició el baile.
Sólo pude pensar el dolor de cintura que tendría aquél buen hombre cuando terminase su "trabajo", y lo difícil que le resultaría volver a la vertical después de tan duro trabajo.
Hace unos domingos me resultó curiosa la forma de ganarse la vida de este personaje.
Quizá debí fotografiar todo el proceso, pero cuando quise darme cuenta, ya era tarde.
Las piernas del bailarín son las piernas del "actor", y las de la bailarina son sus brazos. Una vez estuvo caracterizado, conectó la música e inició el baile.
Sólo pude pensar el dolor de cintura que tendría aquél buen hombre cuando terminase su "trabajo", y lo difícil que le resultaría volver a la vertical después de tan duro trabajo.